Biografía del hambre- Amélie Nothomb

Después de leer su experiencia en una gran empresa japonesa en Estupor y temblores, Biografía del hambre nos acerca a un recorrido de la infancia y adolescencia de esta autora tan interesante. En este libro se nos plantean las diferentes formas en que se puede experimentar el hambre: la cultural, la amorosa, la ávida de descubrir y la puramente física. Con sus experiencias nos hace pensar de nuevo en el mundo que nos rodea, siempre con su particular forma de contar su vida, que es uno de los puntos más interesantes de la autora.

Comienza explicándonos que en el archipiélago de Vanuatu, lleno de riquezas, nadie tiene hambre ya que todo lo que desean lo tienen en su haber sin tener que molestarse en luchar por ello. Tras este ejemplo nos habla de la tristeza de la ausencia del hambre para el ser humano. Pero aquí no se limita solo a hablar del hambre física, por la comida, si no que empezará a hablarnos de su hambre por todo y de lo importante que es sentirla, ya que parece proporcionarnos la vida.

Tal como ya sabía, su padre fue diplomático de varios países por lo que toda la familia tuvo que viajar muchísimo y gracias a ello Amélie ha tenido una vida tan atípica y se ha convertido en la mujer tan interesante que es hoy en día. Es cierto que cuando lees sus relatos es inevitable pensar en si todo lo que cuenta es totalmente real o no porque cuesta pensar que siendo una niña tuviera ideas tan brillantes o se comportara de la forma en la que leemos. No obstante me encanta leerla. Tiene un no sé qué que engancha y que hace que devores sus libros y que tengas ese hambre por seguir leyendo sus obras.

He podido ver los diferentes sitios donde ha vivido y creo que eso le ha dado una cultura y visión del mundo impagables; aunque también ha experimentado el dolor de ver más cosas que no le gustaban. De hecho, ya al final del libro relata su problema con la anorexia, que yo desconocía, aunque de forma muy breve.

Me ha gustado tanto como Metafísica de los tubos. Su forma de jugar con las experiencias, con el lenguaje y su inteligencia me fascinan. Eso sí, siempre acude a mí un pensamiento cuando he intentado ponerme a escribir y es que no me ha pasado nunca nada tan fascinante, ni nada me ha marcado tanto en la vida como para desarrollar historias del tipo. Supongo que para ser escritor tiene que haber algo dentro de ti que quieras extraer o mostrar al mundo, o tienes que vivir experiencias que te marquen. El caso es que yo me veo tan poco capacitada...

Nota: 8

Lo mejor: El libro en general me parece muy bueno. A los seguidores de la Nothomb les encantará: un libro del estilo al que estamos acostumbrados pero con mucha calidad y más fondo.

Lo peor: Nada destacable.